HISTORIA

      La aparición de la Cultura Neolítica en la zona Noroccidental de la Península no aparece, según algunas teorías, hasta el III milenio a.C., aunque algunos autores datan ciertos megalitos peninsulares neolíticos en el IV milenio a.C.

     Es conocido desde la antigüedad el carácter sagrado del Monte Teleno, recientes descubrimientos podrían hacer pensar en la existencia de un gran complejo Megalítico prehistórico cuya importancia está por determinar, aunque las hipótesis  barajadas llevan a pensar en destacados lugares de culto a Tileno,  en los que se realizarían ceremonias relacionadas con ritos cósmicos, estacionales, funerarios, ofrendas a los dioses... similares a las de otros santuarios prehistóricos conocidos. La principal función de los Megalitos  era la funeraria, puesto que servían mayoritariamente de enterramientos colectivos. Las construcciones megalíticas pudieron ser también centros de significación religiosa. Es posible que algunos menhires y crómlech sirviesen de señalización de los lugares de reunión de los distintos clanes. Ciertos menhires parecen señalar cruces de caminos, e incluso se especula con la posibilidad de que los megalitos fueran marcadores de zonas de gran energía "telúrica".

    Aunque existe tradición de grabados desde el Paleolítico Superior, es a partir del Neolítico cuando se inicia en el Noreste y en la zona atlántica de la península ibérica un arte al aire libre de grabados sobre granito, cuarcita y pizarra: son los petroglifos, grabados rupestres realizados por antiguos pobladores utilizando la técnica de incisión o del picado con objetos de piedra o metálicos puntiagudos.



Idolo de Tabuyo

Petroglifo en zona cercana al Teleno

                      

 

     El Arte Megalítico es un distintivo: sólo aparece en determinados sepulcros, sin tener relación con las fechas de los mismos.

     Los Petroglifos encontrados  suelen estar grabados sobre peñas horizontales y no en verticales, ya que es más fácil trabajarlos en el suelo. Las representaciones más frecuentes son de carácter esquemático, semi-esquemático, geométrico y abstracto, así como cazoletas y motivos circulares, siendo más raras las expresiones figurativas.      

  

            

                   Piedra en relieve pintada color rojizo (Destriana)

     

         Piedra aparentemente trabajada (Destriana)

 

En Destriana el hábitat de los primeros pobladores posiblemente finales del Neolítico  hasta la 1ª parte de la edad de Hierro estaría situado en lugares donde existiese  una cierta elevación del terreno , para evitar ser sorprendidos por sus enemigos, ya que el pillaje  era muy usual entre ellos, y cerca de lugares donde hubiese agua es decir fuentes o ríos , esto nos lleva a  situar estos poblados en la zona del rio Peces.

La situación generalizada de estos hábitats o castros  suele ser

   1º  En las Vías Naturales tanto las construidas por:

               a)  Alguna corriente de agua (rio, arroyo..)

               b)   Pasos Naturales                           

   2º  A lo largo de caminos que a veces coinciden con las Vías Naturales y que a veces estos caminos son seguidos posteriormente  por vías romanas.

  3º  En las zonas de riqueza minera (Castrillón ) Velilla de la Valduerna. Destriana también fue zona aurífera.

   La tipología de la situación y asentamiento de cada uno de los hábitats es muy variada, aunque en su situación haya algo siempre en común y es el agua que cuando no es en forma de corriente continua, es en forma de fuente o cueva de las que casi siempre se habla cuando se trata de un castro.

     En la diversa tipología es donde encontramos una relación con el medio geográfico más intensa y también una acomodación a éste, así como una transformación o adecuación del  espacio geográfico a unos fines concretos (1)

(1)   TOMAS MAÑANES   El Bierzo pag 84-94

Entre los lugares  más característicos donde pudieses estar los poblados tenemos los siguientes:

-     En un espigón o altozano o cerro testigo situado al lado de una corriente de agua, que además dominan una llanura próxima.

-     En la ladera de un monte, es decir a media altura, entre el valle y lo alto de la montaña, es lo más habitual.

-      En una Acrópolis, es decir en la zona más alta.

 

     En todos estos casos siempre hay una trasformación del terreno que se puede ver sobre todo en los fosos, con que rodean el hábitat , además la parte superior se allana  a fin de colocar las viviendas o se escalona es decir se acomoda  a la pendiente.

   Las dimensiones no son excesivas, ya que están normalmente por debajo de los 150m de longitud en su eje mayor. Hay algunos casos que los superan pero son siempre excepciones.

       En la Edad de Hierro estas tierras estaban ya habitadas por tribus ya considerados autóctonas.

       Los Astures, eran tribus que practicaban el pastoreo, y una incipiente agricultura, fabricaban recipientes cerámicos y se dedicaban al arte de la guerra. Trabajaban el hierro. Habitaban en aldeas fortificadas de difícil  acceso, dotadas de muros y fosos y otras obras defensivas , sus viviendas eran de adobe o piedra, de planta circular u ovaloide.

       Ya en el Neolítico existía este tipo de poblados fortificados cuando el hombre se convirtió en sedentario.
    A esta etapa pertenece la losa sepulcral de Tabuyo del Monte (León), escasos 9Km de Destriana que representa un ídolo con forma humana y dos armas (una alabarda y un puñal). Muy similar al de Peña Tú  (Asturias). Estos poblados se perpetuaron  en la E. de Bronce, pero fue en la E. de Hierro cuando alcanzaron  su mayor esplendor. Son conocidos como Castros.

      Otras pueblos que llegaron a éstas tierras desde finales de la E.de Bronce, fueron los Celtas,(Luggones)que se adaptaron y mezclaron con las gentes que ya habitaban  estas territorios,(Astures).Orniacos   

     En los siglos IV  y V de nuestra era llegaron de las islas Britanicas una segunda oleada de tribus Celtas, ya que habían sido empujados y desplazados de sus tierras, más y más hacia el Oeste de la isla por otras tribus bárbaras (anglos, sajones y jutes) Ante este hecho, muchas tribus celtas decidieron abandonar la región en masa y emigrar hacia zonas que ellos conocían como célticas. Así, muchos de ellos cruzaron el Canal de la Mancha hacia la Península de Armorica (la actual región céltica de Bretagne, en Francia). Otros sin embargo, navegaron un poco más lejos del Sur de Inglaterra.        

       Hasta llegar y desembarcar en el Noroeste de la costa Cantábrica de España: en Asturias, donde ésta provincia linda con la de Lugo.

      Es a partir de mediados del siglo II a.C. y durante toda la segunda mitad del mismo, los ejércitos romanos avanzaron agresivamente hacia el septentrión de la Península

traspasando la línea del Duero por casi todos sus tramos. Primeramente, a partir de 153 a.C., iniciaron los ataques contra Numancia, los arévacos y los vacceos (año 151 a.C.). Expediciones militares romanos más allá del Duero hacia el norte propiciaron la obtención de noticias de carácter geográfico y etnográfico acerca del área y las gentes de la franja septentrional peninsular extendida entre ese río y el océano.

  La organización administrativa del Noroeste de la Península Ibérica realizada por Roma tras la conquista fue a la vez lógica y simple: creación de una unidad Asturia et Gallaecia, parte a su vez de la Hispania Citerior que estaba subdividida en siete conventii cuyos nombres conocemos a través de la lista que dejó Plinio. Los tres conventii del Noroeste fueron Conventus Asturum, Conventus Lucensis y Conventus Bracarum, y con ellos, tras las profundas reformas del Emperador Diocleciano, se formó la Gallaecia o Callaecia.

      Dentro de este contexto los pueblos Astures y celtas estaban concentrados en  todo el territorio del Noroeste abarcando la zona que comprende las actuales comunidades autónomas de Galicia y Asturias, la provincia de León, el norte de la provincia de Zamora, y el norte de Portugal hasta el Río Duero. Cabe comentar que son dos los pueblos o tribus que se asentaron en esta vega del Duerna por una parte los Orniacos pueblo Astur y los Luggones tribus celtas que se quedaron aquí al dividirse ya que parte de ellos atravesaron las montañas del Norte llegado a poblar parte de territorio actual de Asturias.

Convento Asturicense
   El Conventus Iuridicus asturicensis o Conventus Iuridicus Asturum fue una división judicial romana de la provincia Tarraconense, creado entre los imperios de Augusto y de Claudio, y fue uno de los incluidos por Caracalla en la efímera provincia Nova Hispania Citerior Antoniniana, para pasar a formar parte con la reforma de Diocleciano de la provincia de Gallaecia. Su capital era Asturica Augusta y a su frente estaba un legatus iuridicus senatorial, designado por el emperador, pero sometido al legado de la provincia.
   Sus límites coinciden con los del pueblo prerromano de los astures y, aunque no están suficientemente claros en toda su extensión, comprendía los actuales territorios de las provincias españolas de León, Asturias, la mitad occidental de Zamora y la mitad oriental de Lugo y Orense, también incluía la región portuguesa de Tras os Montes.

   Su nombre proviene de la antigua instalación de los astures en dichos territorios.